Tarima Multicapa:
Ese tipo de tarima flotante consiste en un suelo formado por varias capas, de las cuales unas de las capas inferiores que no son visibles están elaboradas por varios tipos de madera distinta, mientras que la capa superior está hecha a base de madera noble.
Este tipo de tarima es muy novedoso ya que permite el mismo acabado visual que una instalación de un parquét de madera maciza. Los supera varios aspectos, como temperatura disminuyen, ya que al disponerse las sucesivas capas con las vetas perpendiculares, las deformaciones de las piezas debido a la humedad o en estabilidad dimensional.
El tratamiento es sencillo dado que es conocido como barnizado y lijado.
Tarima sintética o laminado:
El suelo flotante laminado es una alternativa económica
a la madera noble, la cual da un gran realismo. Se caracteriza por una composición en capas que la hace más resistente al desgaste.
Hay que saber que este tipo de tarima flotante está constituido por laminas o paneles de derivados de madera unido por resina de una gran resistencia. Dado que esta constituido por los materiales indicados anterior mente, aumenta la resistencia a los arañazos, la humedad o los golpes.
Lo que conlleva la instalación es que cuando se desgastan, no admiten acuchillado a diferencia de la madera maciza.
Ese tipo de modelo de tarima es ideal para las personas que no quieren invertir mucho en la reforma.
Tarima de madera maciza:
Éste tipo tarima es de madera es noble,
por lo que conlleva que el precio se eleve más. Lo bueno que tiene es que para su mantenimiento es posible el acuchillado y barnizado posterior.
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